Hola lectores!
¿Cómo llevan el confinamiento? Espero que les esté dando tiempo para leer y de esa manera aprovechar para sumergirse en otro mundo y desconectar un poco de nuestro día a día.
A nuestra seguidora Sonia Suárez, si le está dando tiempo para leer y nuevamente quiere compartir su opinión sobre su última lectura: El Alma de las flores de Viviana Rivero.
Sinopsis
Cuando la joven y atractiva María Álvarez aparece en la vida de los gemelos Díaz Montero,
herederos de un emporio jamonero, estos están enfrentados por diferencias ideológicas. Con ella de por medio, la relación entre ellos no volverá a ser la misma, como tampoco lo será el aristocrático jardín de doña Encarnación, su madre. Las plantas han comenzado a sufrir cambios inexplicables: las rosas de Provenza muestran una debilidad extrema, los crisantemos son insuficientes para las tisanas, el narciso se desvanece misteriosamente… Lo que Encarnación no sabe es que la debacle de su jardín presagia la trágica grieta que dividirá a su familia y a toda España tras los acontecimientos políticos que llevarán a la guerra civil.
Años después, Rafael Becerra, un argentino en crisis existencial, decide afincarse en Madrid para curar sus heridas. Atrás quedarán su trabajo de profesor de música, la mujer que alguna vez amó y su pequeño hijo. Para convertirse en un hombre nuevo, deberá enfrentarse a los desafíos propios de ser inmigrante en la tierra de su abuela María. Mientras tanto, una sucesión de hechos fortuitos le permitirá comprender por qué su abuela nunca hablaba sobre los años vividos en España, cuando algo terrible la empujó al exilio.
María y Rafael, cada uno en su época, compartirán la lucha por la supervivencia en tiempos difíciles y la irrupción salvadora del amor en el momento más inesperado. En esta novela sobre el poder de los sentimientos, Viviana Rivero vuelve a demostrar que es una auténtica maestra para la creación de tramas intrincadas y apasionantes, así como de personajes inolvidables.
Opinión
Viviana Rivero, para mí una autora también desconocida, y finalista del Premio Planeta de Novela de 2019, en tercer lugar, une en esta historia el amor e la inmigración en dos momentos históricos, separados casi por un siglo: uno en la época actual y otra en el comienzo y durante la Guerra Civil Española.
Su autora, reconocida escritora argentina, realiza un gran trabajo de investigación sobre la Guerra Civil Española, con el fin de poder presentar esta novela a los Premios Planeta en el año 2019. Y se cierne muy bien a uno de los mantras más socorridos de nuestros abuelos/-as: “Hermanos que se mataban por tener diferentes ideologías políticas “
La novela cuenta la historia de María, una española que, en plena Guerra Civil, decide tomar las riendas de su vida y alejarse de una tumultuosa historia de amor y diferencias ideológicas. Al mismo tiempo, el nieto de María, Rafael viajará desde Argentina a Madrid en la búsqueda de un nuevo destino y las raíces de su abuela. La curiosidad de Rafael, por conocer la historia de su Abuela María, le dará un giró a la vida de su familia.
Ambas historias se entrelazan con guiño al realismo mágico: el jardín de Encarnación: rosas de Provenza, Azucenas, Dalias, Geranios, Nardos,….. y
ubicaciones de la ciudad de Madrid que servirán de escenario a las historias de sus personajes: La Plaza de Los Carros, Cine Callao, Ateneo de Madrid, Café Lion, La Plaza Mayor,…
Te invito a descubrir esta historia de amor.
Muchas gracias por tu aportación Sonia. Animo al resto de seguidores, a contarnos sus opiniones sobre sus lecturas actuales y hacernos pasar más amenas estas jornadas. Puedes enviarlas a etereoromantica@gmail.comY recuerda #YoMeQuedoEnCasa
Esta es de las mejores lecturas de novela romántica que he disfrutado. La autora es capaz de mostrarnos la angustia que la pérdida del habla puede generar. Estoy segura que hay un término médico pero en la novela no se explica. Simplemente la parte del cerebro de Christian destinada al habla está afectada tras el duelo, en el cual le dan por muerto. La frustración en el duque es palpable y el brillo de esperanza que surge cuando comprende que Maddy no lo toma por loco, lo sientes como propio. Por supuesto, Christian es un ególatra, acostumbrado a los lujos y sin lugar a dudas a hacer lo que él desea. En un principio ve en Maddy un instrumento para lograr mantener su título y propiedades que su propia familia le quiere sustraer. El lector es capaz de captar la evolución en este personaje, sus rabietas, la furia, la indefensión y por supuesto, el amor que poco a poco siente por “niña Maddy”.
Con Maddy Timms descubres la sensibilidad extrema y una paciencia inhumana, pero sobre todo, descubres el mundo cuáquero de la época. Aunque él es quien terminó robando mi corazón, el papel que desarrolla Maddy en la trama es enternecedor. Ella es más que su enfermera, Maddy termina siendo su centro, aun cuando va recuperando su autonomía. Les separan la clase social y la religión, aunque por momentos ella pueda sentirse indispensable para conectar a Christian con su mundo, en el fondo sabe que en algún momento su relación con él acabará. El complejo de inferioridad que ella refleja lo esconde bajo el carácter de maestra de escuela que esgrime delante del duque. Esto se puede entrever en los diálogos. Las conversaciones entre ellos son una delicia, pues la autora no olvida en ningún momento la incapacidad del duque. Los los tiras y aflojas de los protagonistas me parecieron sublimes.
Una, como lectora, conecta de forma directa con esta joven. La autora consigue que vayamos insuflándole ánimos a medida que ella va tomando coraje para dejar a su pareja manipuladora y violenta. Entre medias, Tina logra tener una ilusión cuando se topa con una carta fechada en los años 40. Ella trabaja los sábados en una tienda de beneficencia donde se vende ropa usada, y quien quiera, puede dejar la que no necesita. En una de tantas prendas, descubre una misiva que nunca fue enviada. Esta, le descubre a un joven que pedía matrimonio a una chica llamada Christina de la que se puede entrever un amor profundo. En la carta hace constar la necesidad de pedir una licencia especial al encontrarse ella embarazada.
angustiante y violenta vida de Tina se intercala con otro flashback al pasado. Exactamente, a los años previos a la II Guerra Mundial. En estos saltos en el tiempo conocemos la relación de la joven pareja que crean Billy y Christina. Ellos, como se puede entender tras leer esa reveladora carta, no logran superar las adversidades. Ella es hija de un médico, él trabaja cargando cajas en una panadería. Los padres de Christina se oponen a su relación y ellos intentarán mantenerse unidos. La vida que les depara a cada uno de los personajes nos lleva a conocer la Irlanda profunda, las vueltas del destino y el valor en tiempos difíciles.
Aconsejo su lectura a las amantes de la novela histórica, sin más romanticismo, pues esta no logró que se aligerara mi corazón ante una bonita historia de amor. Tampoco logró que suspirara ante un protagonista seductor, ni mucho menos sentí ese cosquilleo cuando leo una escena cargada de romanticismo.
Begoña, la protagonista, arrastra una vida dura para su corta edad. Después de estar años acompañando a su padre en su labor de médico, se ve obligada a casarse con el conde de Nogales: un carlista. Desconfiada por necesidad, vive en Ramales rodeada de conspiraciones políticas.
El californiano presenta el papel de hombre hecho a sí mismo, reforzando la idea que tenemos del WILD WEST y con un carácter abierto, espontáneo y burlón. La química surge enseguida en el matrimonio de conveniencia pero deberán vivir difíciles circunstancias para que Juan venza las reservas, miedos y traumas que Begoña guarda consigo.
Después de leerla puedo asegurar que no es sólo una novela romántica sino una historia de amor muy bien ambientada, con personajes cuyas personalidades están finamente elaboradas y un trabajo histórico minucioso. Me ha encantado acompañar a los personajes por los montes cántabros, como también he disfrutado descubriendo parte de la historia española y sus escenarios.
La Segunda Guerra Mundial ha finalizado y el joven comienza a contar su experiencia en la guerra y el amor por una mujer que siempre lo mantuvo vivo. Ella es Emma, su vecina.
La narración vuela desde el vagón al pasado con mucha agilidad, de manera muy cercana, haciendo fácil la lectura. Las preguntas de la señora Watts casi parece que las hacemos nosotros mismos. Matt es un chico que desde siempre quiso pilotar un avión y con el tiempo servir a su país. 
A través de él conoceremos los entresijos de la guerra, las amistades que afianza, la vida militar y cómo se puede compaginar el amor En tiempos de guerra.
Judith es inglesa, vive al norte de Inglaterra y acude desde niña a las ferias que los clanes realizan una vez al año. Allí conoce a lo que será su mejor amiga, Frances Catherine y la rivalidad existente entre ingleses y escoceses. A pesar de ser de pueblos distintos y las distancias que separan sus residencias habituales, ellas mantienen una amistad inquebrantable. Los miedos al parto por tener varias mujeres fallecidas en su familia, hacen que Frances pida que se mantenga a su lado cuando dé a luz. Su amiga se ha casado con el hermano menor de Ian Maitland, jede del clan. La petición de Frances se convierte en un asunto de vital importancia e Ian junto a varios guerreros deciden ir a Inglaterra en busca de la inglesa.
refinadas chocan con las formas rudas de Ian. Su arrollador atractivo y fuerza de carácter afectan a la joven, tanto, como su belleza lo hace en el jefe. La tenacidad de la inglesa, su dulzura, honor y lealtad a su amiga Frances sorprenden al escocés. Esta, poco a poco, se va ganando el cariño de los herméticos Maitland, haciéndose un hueco entre ellos.
y conoces el secreto que guarda Judith junto a sus tiras y aflojas con Ian. Confieso que es una novela a la que recurro cuando me apetece leer algo ligero, divertido, con tensión sexual y una historia de lo más bonita. Me sorprendo al verme reír cada vez que leo la escena con los ancianos del clan y la boda que se desarrolla. Si me preguntan qué caracteriza a Garwood, contestaría que sus diálogos absurdos y llenos de contradicciones que sacan más de una carcajada. Sus protagonistas tiene algo especial, sus historias se resuelven sin abusar del dramatismo y terminas siempre tomándole mucho cariño a sus personajes.
Olivia Middleton es una joven caprichosa, engreída y egoísta que disfruta denigrando a los demás. Vive bajo la protección del marido de su hermana pero su actitud no muestra el menor atisbo de gratitud. La llegada de Richard Grandison es el punto de partida de la historia. Este engatusa al cuñado de Livia para que reabran la mina de carbón, desplegando una palabrería y perorata que no engaña a Livia pero se mete en el bolsillo al resto. La odiosa protagonista, que siempre se sale con la suya y manipula a sus familiares y amigos como si de títeres se tratara, se empeña en doblegar la voluntad de Jack Payton. Un mozo de cuadra por el que se siente atraída. Esa atracción le muestra su vulnerabilidad ante un ser, para ella, inferior. Livia no duda en esconder su debilidad tras la intención provocar pasión, ira y remordimientos en Jack Payton. La mejor arma que encuentra es fingir interés por el señor Grandison.
de sacar una confesión de amor por parte del mozo de cuadra. Una confesión que lo postre a sus pies y satisfaga su ego. Los desplantes, insultos y situaciones ofensivas llenarán las páginas de la novela. Poco a poco, veremos cómo Livia se expondrá cada vez más y sus actos dejaran de estar guiados por la maldad para ser guiados por el amor.
la transformación de una mujer fría y manipuladora en una persona que desconoce el sentimiento del amor y por ese motivo no sabe cómo manejarlo. Livia se revolverá, renegará y terminará por sucumbir al influjo del mozo de cuadra, postrándose de rodillas ante Jack. Las diferencias sociales siempre están presentes pero la autora logra que, con absoluta lógica, desaparezcan. La evolución del personaje principal se desarrolla de forma lenta sin dejar de perder coherencia. Livia purgará sus pecados, aprenderá de sus errores e intentará que la vida le ofrezca una segunda oportunidad.
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